Memphis, Tennessee – La tormenta ha pasado, pero en Mississippi, la verdadera batalla apenas comienza. La destrucción es evidente y la comunidad enfrenta días, incluso meses, de recuperación.
El gobernador Tate Reeves confirmó que al menos seis personas perdieron la vida debido a las intensas tormentas que azotaron el estado durante el fin de semana. Según el Servicio Meteorológico Nacional, doce tornados tocaron tierra entre el viernes y el sábado por la noche, y las autoridades advierten que el número podría aumentar a medida que continúan las evaluaciones.
El impacto del desastre llevó al gobernador a declarar el estado de emergencia, recordando que este tipo de tormentas han dejado una huella trágica en el estado en años recientes.
“Las tormentas del fin de semana evocaron dolorosos recuerdos de los tornados mortales de 2020 y 2023”, señaló Reeves.
Más de 200 desplazados y daños en 23 condados
El panorama es desolador. Más de 200 personas han sido desplazadas, y se han reportado al menos 27 heridos en distintas zonas del estado. En total, 23 condados han informado daños, mientras que 12 han solicitado asistencia de emergencia, un número que se espera que aumente en los próximos días.
Las áreas más afectadas incluyen los condados de Grenada y Marshall, donde la devastación ha dejado comunidades enteras sin hogar.
El peligro aún no termina: riesgo de inundaciones
A pesar de que los tornados han cesado, los funcionarios advierten sobre nuevos riesgos. Stephen McCraney, director ejecutivo de la Agencia de Gestión de Emergencias de Mississippi, advirtió que la amenaza persiste:
“Los daños y la tormenta no han terminado. Vamos a sufrir inundaciones que afectarán al estado durante la próxima semana y media o dos semanas”, explicó McCraney.
Mississippi se levanta: la comunidad se une en la reconstrucción
La recuperación será larga, pero los habitantes de Misisipi están decididos a salir adelante.
“Es devastador. Hay cosas realmente difíciles de ver y muchos daños”, reconoció el gobernador Reeves. “Nos llevará tiempo, pero haremos lo que sabemos hacer: nos levantaremos, nos ayudaremos a nosotros mismos y a nuestros vecinos”.
El estado enfrenta un desafío enorme, pero la resiliencia de su gente brilla en medio de la tragedia.