Los recortes de DOGE desatan la furia de votantes republicanos

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Manifestantes en el concesionario de Tesla en Bartlett, Foto de: Hunter Demster

El Partido Republicano se encuentra en medio de una tormenta política debido a los recortes impulsados por la administración Trump a través del Departamento de Eficiencia Gubernamental (DOGE), dirigido por el multimillonario Elon Musk. La indignación ha crecido en las últimas semanas, con votantes expresando su frustración en foros públicos y encuestas que reflejan un escepticismo cada vez mayor sobre la implementación de estas medidas.

La promesa de eficiencia que se convirtió en un dilema electoral:

Cuando DOGE se lanzó, la administración Trump lo presentó como un esfuerzo para reducir el tamaño del gobierno y ahorrar dinero a los contribuyentes. Según sus cifras, la agencia ha logrado recortar aproximadamente 115 mil millones de dólares, mediante la cancelación de subvenciones y la reducción de personal. Sin embargo, la ejecución de estas políticas ha generado preocupación, incluso entre los votantes republicanos.

Algunas de las medidas más drásticas, como el desmantelamiento de la Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID), han sido impugnadas en los tribunales. Mientras tanto, los demócratas han señalado la falta de planificación, la influencia de Musk y las repercusiones económicas como signos de una extralimitación peligrosa.

Se estima que decenas de miles de empleados federales han sido despedidos o han aceptado ofertas de rescisión. Si bien alrededor del 20% de estos trabajadores están en el área de Washington D. C., la mayoría se encuentra dispersa en todo el país, incluyendo Texas, Florida y Georgia, estados donde Trump perdió en 2024.

Descontento en las encuestas y presión sobre los legisladores republicanos

Aunque las encuestas iniciales mostraban apoyo a la idea de una agencia centrada en la eficiencia gubernamental, las opiniones han cambiado a medida que los recortes han impactado a los ciudadanos.

  • Un sondeo de NBC News reveló que el 47% de los votantes ahora tiene una opinión negativa de DOGE, mientras que solo el 46% lo considera una buena idea.
  • Una encuesta de Fox News mostró que el 58% de los votantes desaprueba la gestión de Musk en DOGE y el 65% está “muy” o “extremadamente” preocupado por la falta de planificación en los recortes de gasto.
  • Entre los republicanos, un 39% expresó preocupación por la manera en que se han implementado las reducciones.

Este cambio de percepción ha puesto en aprietos a legisladores republicanos, quienes han sido abucheados en reuniones públicas al defender los recortes. La representante Harriet Hageman (Wyoming), una aliada de Trump, enfrentó críticas y gritos de “¡Deporten a Elon!” en un foro reciente. En Nebraska, el congresista Mike Flood también fue recibido con descontento cuando intentó justificar la labor de DOGE.

No todos los republicanos han cerrado filas en torno a Musk. En Utah, la representante Celeste Maloy fue aplaudida en un evento público al expresar dudas sobre los recortes. La senadora Lisa Murkowski (Alaska), conocida crítica de Trump, advirtió que muchos de sus colegas en el Senado no se pronunciarán contra Musk por temor a represalias políticas.

DOGE, un riesgo político en las elecciones intermedias

A medida que se acercan las elecciones intermedias de 2026, los estrategas republicanos temen que el malestar por DOGE pueda costarle escaños al partido. Brian Seitchik, exasesor de Trump, advirtió que si las protestas continúan en distritos republicanos clave, el partido enfrentará serios problemas.

El profesor Peter Loge, de la Universidad George Washington, considera que los demócratas tienen una gran oportunidad para usar la controversia a su favor. “Podrían decir: el gobierno no está trabajando para ustedes, está trabajando para Elon Musk”, señaló.

Por ahora, los republicanos intentan minimizar las protestas, atribuyéndolas a “alborotadores pagados” y a la oposición demócrata. Sin embargo, a medida que el impacto de los recortes se profundiza, el partido enfrenta una batalla difícil para convencer a su propia base de que DOGE fue una decisión acertada.