Un juez federal en Texas declaró este viernes que el programa de Acción Diferida para los llegados en la Infancia (DACA) es ilegal porque el entonces Presidente Barack Obama excedió su autoridad cuando lo creó mediante una orden ejecutiva en 2012.
Cientos de miles de “Dreamers” vuelven a quedar ante un futuro incierto tras la decisión del juez Andrew S. Hanen, del Distrito del Sur de Texas. Hanen, sin embargo, no ordenó la cancelación inmediata del programa.
The New York Times reportó que en su decisión, el juez escribió que el Departamento de Homeland Security puede seguir recibiendo nuevas solicitudes y renovaciones, pero que temporalmente prohíbe su aprobación.
El juez federal de distrito Andrew Hanen aclaró que la orden no obliga al Gobierno a tomar “ninguna medida de inmigración, deportación o penal en contra de ningún beneficiario de DACA”, un programa del que dependen más de 650,000 jóvenes en Estados Unidos.
Los otros estados que presentaron la demanda junto con Texas fueron Alabama, Arkansas, Kansas, Luisiana, Mississippi, Nebraska, Carolina del Sur y Virginia Occidental, todos con gobernadores o fiscales generales republicanos.
Se trata de la segunda vez en que un juez federal de Texas bloquea los planes de inmigración del presidente, Joe Biden, luego de que una corte cancelara su moratoria de 100 días a las deportaciones.
La Corte Suprema decidió en junio de 2020 que este alivió migratorio aprobado por el expresidente demócrata Barack Obama hace casi una década podía seguir adelante, invalidando su cancelación por parte del expresidente Donald Trump en 2017.
Tras ese dictamen, otras cortes inferiores obligaron al Gobierno a restaurar DACA a pleno rendimiento, y con la llegada a la Casa Blanca de Biden en enero han sido miles los jóvenes que se han inscrito por primera vez o que han renovado su solicitud.
Sin embargo, el dictamen de la Corte Suprema se basó en motivos formales (en concreto, en cómo tramitó el Gobierno de Trump su anulación), sin pronunciarse sobre la legalidad del programa en sí.
Por ello, un grupo de fiscales generales de nueve estados republicanos, encabezados por Texas, llevaron de nuevo DACA ante una corte federal de Houston para lograr su anulación.
Biden emitió una orden para fortalecer DACA tras su llegada a la Casa Blanca, pero la suerte de los dreamers (jóvenes llegados ilegalmente al país cuando eran niños de la mano de sus padres, que no han conocido otra patria que ésta) depende, más allá de los vaivenes judiciales, de que el Congreso sea capaz de pactar una solución definitiva.