El peligroso huracán Ida tocó tierra por primera vez este domingo al mediodía en Port Fourchon, Louisiana, con vientos máximos sostenidos de al menos 150 mph (241 kph), calificados como “catastróficos”, según notificó el Centro Nacional de Huracanes (NHC por sus siglas en inglés).
La marejada ciclonica se pronostica para las próximas horas entre 12 a 16 pies en Port Fourchon, explicó Daniel Llargués, vocero de FEMA (Agencia Federal para Manejo de Emergencias) en una llamada con la prensa este domingo.
Es una tormenta “muy peligrosa y de mucha intensidad”, dijo Llargués, “si no evacuó, manténgase en un lugar seguro”.
A las 2 pm (hora del Centro) Ida tocó tierra por segunda vez en Galliano, Louisiana, con vientos de 145 mph. “Las condiciones de huracán se están esparciendo tierra adentro por el sureste” del estado, anunció el NHC en la red social Twitter.
El presidente, Joe Biden, habló desde la sede de FEMA sobre la situación.”La devastación puede ser inmensa, y el gobernador ha dicho que este es el huracán más fuerte desde 1850… No es solo la costa, es el norte también”.
Biden urgió a la población a escuchar las indicaciones de las autoridades locales y aseguró que “apenas pase la tormenta vamos a poner todo el poderío del país para la recuperación”.
El gobernador de Louisiana, John Bel Edwards, dijo en una rueda de prensa que es probable que la gente tenga que resguardarse donde esté por unas 72 horas después del paso del huracán.
“No anticipamos que ninguno de los diques en Nueva Orleans se rebase”, dijo Edwards. Los diques de la ciudad son de especial preocupación, pues no aguantaron hace 16 años con el embiste del huracán Katrina, que era de categoría 3. Desde eso, la ciudad ha instalado nuevos diques y nuevas tecnologías para prepararse para un evento de esta magnitud, dijo el gobernador. “Es otra época… no es que estemos confiados, es que es un hecho”, que no se van a romper o a rebasar, añadió.
De la noche a la mañana del domingo, Ida se convertió en tiempo récord en un huracán categoría 4, y estaba a tan solo 7 millas por hora (11 kph) de convertirse en categoría 5, la más destructiva en la escala, suficiente para arrancar los techos de las casas y los árboles de raíz. Con ráfagas de hasta 180 mph (290 kph)sería el huracán mas fuerte que ha golpeado al estado de Louisiana.
Por ello, el NHC emitió la alerta máxima de vientos para un huracán y advirtieron que los daños por vientos serán más fuertes que los del huracán Katrina.
Estos efectos ya eran visibles en partes de Nueva Orleans, como este techo que fue arrancado en el barrio francés, en la calle Decatur.
El sistema de respuesta de emergencia en la ciudad anunció que suspendió sus operaciones debido a los fuertes vientos y añadió que resumirían una vez sea seguro para sus trabajadores.
La Junta de Alcantarillado y Agua allí anunció que experimentaron cortes de energía en “varias” bombas de la ciudad y urgieron a los residentes a usar el mínimo de agua posible. Para las 2 pm del domingo, unas 320,000 personas habían perdido electricidad en el estado, donde lo peor aún está por llegar.
Las fuertes lluvias desde hoy hasta el lunes en toda la costa central del Golfo, por todo el sureste de Louisiana, la costa de Mississippi, hasta el extremo suroeste de Alabama, resultarán en considerables inundaciones, repentinas y en zonas urbanas, que amenazan la vida”. También se inundarán significativamente los ríos.
Puede seguir habiendo “inundaciones importantes en partes de los valles del Bajo Mississippi, Tennessee y Ohio hasta el miércoles”, dijo el NHC.
Sharon Broome, la alcaldesa de Baton Rouge, Louisiana, anunció que impusieron toque de queda desde el amanecer hasta el anochecer y que abrirán el centro Raising Cane’s River Center como refugio para los damnificados.
El presidente, Joe Biden, declaró estado de emergencia federal para Louisiana y Mississippi. Así también lo hizo a nivel estatal el gobernador Edwards.
Unas 5,000 tropas de la Guardia Nacional han sido movilizadas en 14 parroquias estatales para participar en trabajos de búsqueda y rescate, mientras que 10,000 trabajadores del tendido eléctrico están preparados para responder a los posibles cortes en el suministro eléctrico, que pueden ser prolongados.
Llargués, el vocero de FEMA, dijo a la prensa que la agencia envió a Louisiana 2,400 de sus empleados, 10 equipos de manejo de incidentes, 12 equipos de búsqueda y rescate, 200 ambulancias, 139,000 carpas, 3.5 millones de comidas, y 2.5 millones de litros de agua, con millones más en camino.
En Houma, Louisiana, un techo enorme fue lanzado por las ráfagas de viento y golpeó un poste de energía frente a Dominator Fore:
En Grand Isle, una de las islas a las afueras de Nueva Orleans, ya entraban las lluvias, vientos y marejadas de varios pies de alto. Allí 98% de los residentes fueron evacuados, dijo el gobernador.
En la parroquia de St. Bernard dos embarcaderos se soltaron y las autoridades no han podido rescatar uno de ellos, dijo el presidente de la parroquia, Guy McInnis al noticiero local WVTM 13