Memphis, Tennessee — Una nueva estrategia federal para acelerar deportaciones estaría impactando directamente a la comunidad inmigrante del Medio Sur. Así lo advirtió el abogado de inmigración Andrew Rankin, quien denunció que agentes de ICE están arrestando a personas justo después de que sus casos son desestimados en la corte de inmigración de Memphis.
“Tenemos una operación que se ha implementado recientemente: agentes de ICE ingresan a los juzgados, a los tribunales de inmigración de EE. UU., y arrestan a ciertos extranjeros al salir del edificio”, explicó Rankin.
Según el abogado, estos arrestos no ocurren durante un juicio, sino al final de audiencias programadas. Asegura que, tan solo en la última semana, al menos ocho personas fueron detenidas en estas circunstancias en Memphis. Información publicada por CBS News indica que situaciones similares se han reportado en otras ciudades del país, como Dallas, donde varios inmigrantes fueron arrestados en la corte el pasado viernes.
Rankin detalla que el proceso comienza cuando el gobierno presenta una moción para desestimar el caso del inmigrante. “El juez dice: ‘De acuerdo, concedo la moción. Sr. Fulano o Sra. Fulana, su caso queda desestimado. Le voy a dar un papel firmado por mí que dice que su caso queda desestimado y puede irse’”, relató.
Todo el procedimiento, aclara, ocurre en inglés o con ayuda de un intérprete judicial, y la persona suele salir confiada de que su proceso ha concluido. Sin embargo, poco después de abandonar la sala o incluso en los pasillos del tribunal, los agentes federales ya los esperan para arrestarlos.
El abogado señala que esta táctica se basa en un criterio específico: el tiempo que el inmigrante ha permanecido en Estados Unidos. “Generalmente se centran en personas que llevan aquí menos de dos años. Y eso se debe a que dos años es el detonante para un procedimiento de deportación acelerada”, explicó.
Para Rankin, esta práctica plantea serias dudas sobre la imparcialidad del sistema judicial migratorio y advierte que podría vulnerar los derechos de quienes comparecen sin representación legal. Por ello, exhorta a la comunidad a buscar asesoría legal si reciben citaciones o notificaciones migratorias.
“Esto no es un acto aislado, es una estrategia”, concluyó Rankin, visiblemente preocupado por lo que considera una amenaza directa al debido proceso.







