TENNESSEE — A partir de este lunes 14 de julio, las autoridades en Tennessee activarán un operativo intensivo para controlar el exceso de velocidad en las carreteras, como parte de la campaña regional “Operation Southern Slow Down”, que se llevará a cabo en conjunto con los estados de Alabama, Florida, Georgia y Carolina del Sur.
Este esfuerzo, liderado por la Oficina de Seguridad Vial de Tennessee (THSO), se extenderá hasta el 20 de julio, y tiene como objetivo reforzar la aplicación de la ley en autopistas principales y zonas de alto riesgo, durante un periodo crítico en el que históricamente se registra un aumento en accidentes fatales.
La iniciativa involucra una movilización policial a gran escala, en la que participarán múltiples agencias de seguridad locales, entre ellas la Patrulla de Carreteras de Tennessee (THP), el Departamento del Sheriff del Condado de Shelby, y los departamentos de policía de Memphis, Collierville y Bartlett.
Durante la semana del operativo, se espera que las autoridades aumenten los patrullajes, realicen más paradas de tráfico y apliquen con mayor rigor las leyes de velocidad, especialmente en los tramos identificados como de mayor riesgo.
Esta es la novena edición de una campaña que busca reducir las muertes en las carreteras del sureste de los Estados Unidos, en una temporada de verano donde los desplazamientos por carretera son más frecuentes y, con ello, también los riesgos.
El operativo es parte de un programa desarrollado por la THSO con apoyo de la Administración Nacional de Seguridad del Tráfico en las Carreteras (NHTSA), y está financiado en su totalidad con fondos federales. La misión de esta oficina es clara: proteger la vida de los conductores, pasajeros, peatones y ciclistas en todo el estado.
Las autoridades han recalcado la importancia de reducir la velocidad, respetar las señales y conducir con responsabilidad, ya que este tipo de campañas no solo buscan sancionar, sino también crear conciencia y prevenir tragedias.








