El Senado logra acuerdo bipartidista que podría reabrir el Gobierno tras 40 días de cierre

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Capitolio de Los Estados Unidos. Washington, DC

Después de 40 días de parálisis federal, el Senado estadounidense logró finalmente romper el estancamiento político. En una sesión marcada por tensas negociaciones y un inusual consenso bipartidista, los senadores aprobaron este domingo un acuerdo de financiación que abre la puerta a la reapertura del Gobierno en los próximos días.

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El voto final fue de 60 a 40, el mínimo necesario para avanzar la medida. Siete demócratas y un independiente se sumaron a los republicanos, permitiendo que el proyecto pase a consideración formal del Senado. De aprobarse en su totalidad, la medida deberá ser ratificada por la Cámara de Representantes y luego firmada por el presidente Donald Trump.

El cierre actual, que ya cumplió más de un mes, se ha convertido en el más prolongado en la historia de Estados Unidos, afectando agencias federales, aeropuertos y programas de asistencia social.

El pacto aprobado contempla tres leyes de asignaciones presupuestarias que financiarán departamentos como el de Agricultura hasta el final del año fiscal, y una resolución de continuidad que mantendría operando al resto del Gobierno con los niveles de gasto actuales hasta el 30 de enero.

El texto también incluye fondos completos para el Programa de Asistencia Nutricional Suplementaria (SNAP) antes conocido como cupones de alimentos hasta septiembre del próximo año, un punto crítico en las discusiones, dado que millones de familias dependen de esa ayuda.

Sin embargo, el acuerdo deja fuera una pieza clave para los demócratas: la renovación de los subsidios de la Ley de Cuidado de Salud Asequible (Obamacare), que expiran en las próximas semanas. A cambio, los republicanos aceptaron que el Senado vote por separado un proyecto de ley sobre ese tema antes de mediados de diciembre.

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El líder demócrata Chuck Schumer fue tajante en su rechazo:

“Debo votar NO. La crisis de atención médica es tan grave, tan urgente, tan devastadora para las familias en casa que no puedo, de buena fe, apoyar una resolución provisional que no la aborde”, afirmó Schumer desde el pleno del Senado.

A pesar de la división, el líder de la mayoría republicana, John Thune (Dakota del Sur), calificó el resultado como “un paso responsable hacia la estabilidad fiscal del país”.

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El acuerdo fue resultado de intensas conversaciones durante el fin de semana, encabezadas por Jeanne Shaheen (D-NH), Angus King (I-ME) y Maggie Hassan (D-NH), con respaldo de la Casa Blanca. En el lado demócrata, se sumaron Dick Durbin (Illinois), John Fetterman (Pennsylvania), Catherine Cortez Masto (Nevada), Jacky Rosen (Nevada) y Tim Kaine (Virginia).

Fuentes de NBC News revelaron que el texto incluye una cláusula que revierte los intentos del presidente Trump de despedir a empleados federales durante el cierre mediante notificaciones de “reducción de personal”.

Ya se habla de convocar a la Cámara de Representantes a partir del miércoles para avanzar en el proceso. Si ambas cámaras dan su aprobación, el Gobierno podría reabrir en cuestión de días.

Los efectos del cierre ya son visibles en todo el país. En los aeropuertos, la falta de personal de seguridad ha generado retrasos y cancelaciones, justo antes del feriado de Thanksgiving. Mientras tanto, agencias federales advierten sobre la escasez de fondos para programas sociales esenciales.

El estancamiento presupuestario comenzó el 1 de octubre, cuando el Gobierno federal se quedó sin fondos para el año fiscal 2026 debido a las disputas entre republicanos y demócratas sobre salud pública y subsidios del Obamacare. Los demócratas exigen su renovación, argumentando que sin ellos las primas de los seguros médicos se duplicarán para millones de estadounidenses.

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Este posible acuerdo no representa el final del conflicto político, pero sí un alivio temporal para un país cansado de la parálisis. Como dijo un asesor del Senado al cierre de la jornada: “No es el acuerdo perfecto, pero es el primero en 40 días que realmente puede poner en marcha al país otra vez”.