(NewsNation) — La administración Trump dio un paso más en su estrategia migratoria. Este sábado, Tom Homan, secretario de la Casa Blanca para la frontera, confirmó que 1,700 efectivos de la Guardia Nacionalserán enviados a 19 estados del país para apoyar al Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE).
El anuncio fue contundente: las tropas servirán como un “multiplicador de fuerza” para ICE, pero sin involucrarse en arrestos directos. Su labor será de apoyo logístico, transporte e inteligencia, explicó Homan en entrevista con la corresponsal de NewsNation, Libbey Dean.
“ICE está desbordado. ICE tiene menos de 5,000 oficiales de deportación. Tenemos más de 20 millones de inmigrantes indocumentados”, afirmó Homan. “Casi 700,000 de ellos tienen antecedentes criminales y estamos tratando de localizarlos”.
Tennessee y Arkansas, entre los estados que recibirán tropas
Autoridades confirmaron que parte de los efectivos se desplegarán en Tennessee y Arkansas, estados con fuerte presencia de comunidades inmigrantes.
En total, la Guardia Nacional operará en: Alabama, Arkansas, Florida, Georgia, Idaho, Indiana, Iowa, Luisiana, Misuri, Nebraska, Nevada, Ohio, Carolina del Sur, Dakota del Sur, Tennessee, Texas, Utah, Virginia y Wyoming.
El Pentágono adelantó que la misión tendrá una duración inicial hasta mediados de noviembre, aunque no descartó que se extienda dependiendo de las necesidades de ICE.
Enfocar esfuerzos en arrestos
Según Homan, la incorporación de la Guardia Nacional permitirá que los agentes de ICE concentren sus recursos en arrestar a migrantes con antecedentes criminales o considerados de “alto riesgo”, mientras las tropas militares asumen tareas secundarias.
La medida llega en medio de un ambiente político cargado, donde la inmigración vuelve a ser un tema central en el discurso de Trump. Gobiernos estatales, en su mayoría republicanos, han respaldado este plan como parte de la ofensiva presidencial contra la criminalidad y la situación de seguridad en el país.
No es lo mismo que Washington D.C.
El Pentágono aclaró que este despliegue no debe confundirse con la reciente presencia militar en Washington, D.C., ordenada por Trump tras criticar las condiciones de seguridad en la capital.
“Esta es una misión independiente de la misión de apoyo a D.C.”, declaró un portavoz del Departamento de Defensa. “Las preguntas adicionales sobre el apoyo de personal a ICE deben dirigirse a los estados que respaldan la misión”.
Mientras tanto, las comunidades inmigrantes permanecen en alerta. La llegada de tropas a sus ciudades podría significar un endurecimiento en las operaciones de deportación, y con ello, mayor temor en los barrios donde miles de familias indocumentadas intentan vivir en paz.







